•  Moonbeam III, en Big Boats, y Alba, en Clásicos 1, logran su quinta victoria y mantienen la igualdad en la clasificación honorífica de máximos títulos logrados
  • El Sonata se estrena como ganador, en los Época Marconi, mientras que el Marigold suma su tercera victoria consecutiva en la categoría Época Cangreja
  • El Guia también inaugura su palmarés, en la flota Clásicos 2, en la prueba más prestigiosa del Mediterráneo que reúne a las principales leyendas del mar

IX REGATA PUIG VELA CLÀSSICA

La novena edición de la Regata Puig Vela Clàssica será recordada por sus excelentes condiciones de viento. Nunca antes había sido tan constante durante sus tres jornadas, y si bien es cierto que no sopló tan fuerte como en alguna de las citas precedentes, el campo de regatas barcelonés ofreció un viento térmico de Garbí que nunca bajó de los 10 nudos, promediando en 13 o 14 a lo largo de la competición. Soplaba además con puntualidad británica y facilitó el desarrollo de un programa deportivo con tres pruebas, ya fueran en recorridos entre boyas o en formato costero. El sol no quiso perderse la convocatoria, mientras que la corriente fue protagonista de excepción. Contraria al viento las dos primeras jornadas, alteró las tímidas olas del viento, haciéndolas más cortas, encrespadas y desordenadas, afectando especialmente a los barcos de pequeña y mediana eslora.

La flota reunida este año volvía a superar las 40 embarcaciones, representando a nueve países y con más de 500 regatistas compitiendo. Se agrupaban en las categorías Big Boats (con eslora superior a 22 metros), Época (anteriores a 1950) y Clásicos (anteriores a 1976). A su vez, los Época se dividían en Cangreja y Marconi, acordes a su tipo de velas, mientras se formaban las clases Clásicos 1 y 2 según su tamaño y prestaciones.Una de las novedades de esta edición fue la acertada decisión del comité de regatas para combinar tramos distintos en los recorridos según las categorías, logrando unas regatas disputadas acorde con las posibilidades técnicas de cada flota, que estas no se interfiriesen entre ellas y que la duración fuera lo más pareja posible.

La quinta del Moonbeam III
Los majestuosos Big Boats recuperaban el protagonismo de anteriores ediciones con la participación de cuatro embarcaciones. No faltaban a la cita el Moonbeam III, vencedor en cuatro ediciones, ni el Moonbeam IV, con la victoria del 2014 en su palmarés. A ellos se unía el siempre impresionante Eleonora y el debutante en esta cita barcelonesa, Sumurun, venido desde Estados Unidos. El Mariette of 1915 no pudo salir al campo de regatas por problemas de logística.

IX REGATA PUIG VELA CLÀSSICA

IX REGATA PUIG VELA CLÀSSICA

Lejos de lo que pueda parecer, y tal como ya se había presenciado en ediciones anteriores, esta flota de grandes barcos respira competitividad por todos los poros de sus maderas. Salidas como la presenciada en la tercera y última prueba son un buen ejemplo de táctica y marcajes sin compasión. Cuando el Moonbeam IV trataba de partir amurado a babor, viró para ceder la preferencia de paso al Eleonora, dejando desventado al Moonbeam III, que a su vez decidía virar buscando viento limpio. Pero el Sumurun no desperdiciaba su oportunidad y le viraba en proa para mantenerlo con viento sucio. ¡Todo sucedía en un lapso de 80 segundos tras el tiro de salida!

La victoria final se decidió en la última prueba, que iniciaba el Moonbeam IV con un punto de ventaja sobre el Moonbeam III y dos respecto al Sumurun, mientras el Eleonara matemáticamente ya estaba descartado. Tras una salida de las que crean afición, el Moonbeam III supo rehacerse de los marcajes iniciales y anotarse la prueba, justo por delante de su máximo rival, Moonbeam IV. Empatados a 5 puntos, sus mejores parciales (dos primeros por solo uno de su rival) le aupaban al peldaño más alto, y así, el barco de Carsten Gerlach, que patroneó Erwan Noblet, inscribió por quinta vez su nombre en el palmarés de la Puig Vela Clàssica. Tras el Moonbeam IV, completaba el podio el Sumurun de Armin Fischer, cerrando la tabla el Eleonora, liderado por David Martirano.

Jordi Cabau la consigue
Uno de los armadores y patrones más apreciados en la Puig Vela Clàssica es el mallorquín Jordi Cabau, quien no suele faltar a este cita con su Mercury, inicialmente, y últimamente con el Sonata. Siempre estaba cerca y acariciaba el trofeo, pero nunca pudo levantarlo. Sin duda, la victoria de este año en la categoría Época Marconi hace bueno el refrán: “Quien la sigue, la consigue”.

Y de que manera, pues llegaba a la última jornada en tercera posición, a un punto del Halloween y a dos del líder, Islander. En la tercera y decisiva prueba, el Sonata se imponía al Halloween e Islander, de manera que el trío empataba a seis puntos en la tabla final. Se mantenía la igualdad tras el primer criterio de desempate, al tener idénticos resultados parciales, siendo el orden de la última prueba el que dilucidaba la clasificación final.

IX REGATA PUIG VELA CLÀSSICA

Tercera victoria, y consecutiva, del Marigold en la categoría Época Cangreja de la regata Puig. Las dudas sobre sus opciones frente al más moderno Kelpie of Falmouth o al más pequeño Gipsy, vencedor en las ediciones 2008 y 2011, se iban despejando a lo largo de las tres jornadas de competición. Encadenando una victoria tras otra, el barco patroneado por Jason Gouldstone no dio ninguna oportunidad a sus temidos rivales. El Kelpie of Falmouth, mandado por Charlie Wroe, se llevaba la plata, mientras el Gipsy de Petete Rubio se colgaba el bronce.

Los competitivos Clásicos
La flota de Clásicos reunía la participación más numerosa, con 21 embarcaciones, 10 en la categoría Clásicos 1 y los 11 restantes en Clásicos 2. En ambas, más allá de los resultados, se vivieron grandes regatas, en parte propiciadas por la mejor maniobrabilidad de estos barcos respecto a los más veteranos de las otras categorías. Sus salidas, pasos de boyas o maniobras resultan acordes a los de barcos de competición actuales, siendo siempre dignas de verse. Ocho vencedores de ediciones anteriores estaban presentes, los cuales compitieron en una sola categoría hasta el año pasado, e insinuaban lo cara que iba a ser esta novena edición.

IX REGATA PUIG VELA CLÀSSICA

El máximo aspirante en Clásicos 1, Argos, de Barbara Trilling, patroneado por Eduardo Méndez, con permiso del anteriormente cuatro veces ganador Alba, veía cortadas de cuajo sus aspiraciones tras la primera prueba. Vencedor de la misma, un incidente en la presalida fue motivo de su posterior descalificación, cargándose con 12 puntos. Un lastre que permitía al Alba de Damián Ribas competir con menos presión y hacerse con las dos primeras pruebas, frente al Kanavel, que iniciaba la tercera y decisiva prueba dos puntos tras el líder. No se dejó sorprender el Alba y, anotándose el tercer parcial, se llevaba la Puig Vela Clàssica por quinta vez. Tras el Kanavel de Javier Mestre, se clasificaba el Atrevido, de Nicola Bocca.

IX REGATA PUIG VELA CLÀSSICA

Más dudas en la nómina de aspirantes para alzar el trofeo en Clásicos 2. El Guia de Ramón Rosés daba pocas opciones, y finalmente se anotaba los tres parciales, mientras en su estela, el Samarkand de Ulf Bhone, el Yanira de Andrés de León y el Outlaw de Mike Horsey pugnaban cada eslora para ganarse un peldaño en el podio. Partían empatados a puntos hacia el campo de regatas para disputar la última prueba, cuya clasificación desharía la igualdad. Finalmente, el Outlaw se hacía con el segundo puesto, por delante del Yanira y el Samarkand.